Trabajando JUNTOS
La comunidad de Mayocunda siempre ha luchado por el acceso al agua. Colaboraron con otra organización hace seis años para construir un sistema de agua, pero lo que se construyó resultó insuficiente, dejándolos dependientes de agua de pozo y ríos contaminados. Una familia generosa compartió su viejo pozo a pesar de su contaminación.
Las 70 familias estaban desesperadas por que su sistema volviera a funcionar, tanto en sus hogares como en las dos escuelas de la comunidad. La necesidad de agua era enorme y les hacía la vida difícil. Las cosas eran especialmente difíciles para Cristhian, cuyos dos niños pequeños sufrían de diarrea la mayor parte del tiempo porque estaban bebiendo agua contaminada.

Cuando una comunidad vecina, El Moto Las Brisas, se enfrentó a un problema similar, Amigos for Christ los ayudó hasta que tuvieron un suministro de agua confiable. Esto inspiró a los líderes de Mayocunda, Alma Rivera y Pedro Aguilar, a buscar ayuda de Amigos para Cristo.
Con el apoyo de Amigos for Christ, ambas comunidades unieron fuerzas y formaron un equipo de liderazgo. Comenzaron el trabajo de construir el sistema de agua; cada familia pagó su porción de la conexión de agua; los misioneros vinieron a Amigos con sus iglesias para ayudar a cavar trincheras para el nuevo sistema.
Se necesitaron cuatro meses de arduo trabajo para asegurar agua limpia y corriente en Mayocunda. El nuevo pozo bombea 300 galones por minuto (¡sí, leíste bien!) y proporciona agua a más de 100 familias.

“Todo fue rápido, todos estábamos emocionados por lo que estaba sucediendo. Todos vinimos y trabajamos juntos. Logramos el objetivo que teníamos como comunidad. No se trataba solo de cavar; trabajamos unidos con la gente de la otra comunidad para construir una gran amistad y comunicación. Y ahora el proyecto del agua está en cada hogar y para todos”.

Christian García
Estas familias experimentaron amor, servicio y compasión de sus vecinos y ahora están en camino de ser transformados. Las personas transformadas transformaron a las personas, una transformación que está cambiando muchas vidas en la Nicaragua rural.