Nuestro equipo se ha inspirado en la forma en que Jesús invitó al ciego a decirle simplemente lo que necesitaba, permitiéndole ser parte de su propia curación. Cuando entramos en cualquier hogar rural nicaragüense, vemos las difíciles circunstancias en las que las familias han vivido durante generaciones. Y cuando nos sentamos a escuchar, para entender realmente lo que la gente desea, escuchamos respuestas como esta: