Por tanto, si hay algún estímulo en Cristo, si hay algún consuelo de amor, si hay alguna comunión del Espíritu, si algún afecto y compasión, hagan completo mi gozo, siendo del mismo sentir, conservando el mismo amor, unidos en espíritu, dedicados a un mismo propósito. No hagan nada por egoísmo o por vanagloria, sino que con actitud humilde cada uno de ustedes considere al otro como más importante que a sí mismo, no buscando cada uno sus propios intereses, sino más bien los intereses de los demás.
En su carta a los Filipenses, el apóstol Pablo hace una petición interesante: “hagan completo mi gozo.” Lo que es aún más peculiar acerca de esta petición es que Pablo no buscó encontrar su gozo en recibir pago por su trabajo, sino más bien en ver su trabajo ser pagado hacia adelante. Él conecta su propio gozo personal con la unidad, la humildad y el amor compartidos entre aquellos a quienes cuidaba. En marzo, varias de nuestras comunidades aliadas respondieron a esta llamada y la pagaron hacia adelante. Debido a una estación seca particularmente larga y difícil, la comunidad de Rancho Pando ha estado luchando contra una severa sequía. Esta sequía agotó sus cosechas, obligando a los miembros de la comunidad a ir más allá y pagar más dinero solo para mantener la comida en sus mesas.
Después de enterarse de estos problemas, los líderes de las comunidades vecinas estaban decididos a ayudar.
Trabajando con los promotores de Amigos, la gente de La Grecia, La Danta y El Pedregal recogieron cientos de libras de frutas y verduras frescas de fincas y jardines locales para entregar a sus amigos necesitados. El 24 de marzo, un equipo recolectó estas generosas ofrendas de bananos, papaya, mangos y más. Se hicieron entregas a más de cuarenta familias en Rancho Pando, donde cada bolsa fue recibida con una cara sonriente y un corazón alegre.
En Amigos por Cristo, es nuestra misión servir, para que Cristo sea más visible. Esto significa seguir el ejemplo de Aquel que despojó a Sí mismo tomando la forma de un siervo y amó a aquellos que nunca pudieron pagarle. Jesús vino a este mundo para amar y servir, y Él nos ha llamado a hacer lo mismo. Nuestra meta es seguir este gran ejemplo, y al hacerlo compartir el increíble amor de Jesucristo nuestro Señor.
Haya, pues, en ustedes esta actitud que hubo también en Cristo Jesús, el cual, aunque existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse, sino que se despojó a Sí mismo tomando forma de siervo, haciéndose semejante a los hombres.
Como organización, nuestro objetivo es la transformación de la comunidad. Sin embargo, nuestro gozo no termina ahí. En lugar de experimentar el gozo de un favor devuelto, nuestra última esperanza es tener nuestro gozo completo al ver cada favor multiplicado. Es nuestra visión ver comunidades transformadas continuan transformando a otras comunidades. Esperamos ver la unidad, la humildad y el amor de Jesús compartido y multiplicado en toda Chinandega y más allá. Ayer, la gente de La Grecia, La Danta, y El Pedregal provocó esperanza dando generosamente de aquello con lo que el Señor los había bendecido. Hoy, la gente de Rancho Pando espera ansiosamente el día en el que tendrán la oportunidad de hacer lo mismo.
