Son las 5:30 de mayo de 2009. Los gallos han empezado a cantar, los perros han empezado a ladrar, e Ivette Rivera está vestida, libros en mano, esperando pacientemente el autobús público a la entrada del barrio de Monserrath. Su viaje diario a la universidad está en marcha.
Durante 5 largos años, Ivette siguió esta rutina hasta que recibió su título en Comunicaciones Sociales. Poco después de graduarse, Ivette consiguió un buen trabajo escribiendo artículos diarios para un periódico en línea que miles de personas leían diariamente. Mientras disfrutaba de este trabajo, se dio cuenta de que algo faltaba.
“Dios”, dice, “tenía en mente un plan diferente para mí”. Ese mismo año, asistió al campamento de Vida Joven en Nicaragua. Cuando su relación con Cristo comenzó a crecer, Ivette sabía que quería más para su vida y su carrera. “Quería ayudar a la gente. Quería un trabajo con propósito”, dijo.
El problema era que nadie más en Chinandega estaba contratando periodistas, la carrera que había estudiado durante años. Una amiga le dijo que Amigos por Cristo tenía trabajos disponibles, pero nada específico para escribir o periodismo. Con fe, Ivette envió su currículum. Fue seleccionada para una entrevista y comenzó a orar para que Dios llenara su deseo de usar sus talentos para un propósito.
Si alguna vez has conocido a Ivette, nunca olvidarás su enorme sonrisa, su cálida personalidad y su corazón para la gente. Ivette es auténtica y tiene un don para centrarse realmente en la persona que está justo delante de ella. Estas cualidades eran tan evidentes en su entrevista que le ofrecieron un trabajo completamente diferente en el que le habían entrevistado, uno que fue creado sólo para ella: Escritor de Historias de Amigos por Cristo.
En los últimos 3 años, cuando te has inspirado en una historia en nuestras publicaciones, te has sentido emocionado al ver una foto del Equipo Amigos en Facebook o has compartido un video de Amigos con un amigo, Ivette probablemente estaba detrás de eso. Ella es una escritora experimentada, fotógrafa, y videógrafa extraordinaria. Ella siempre está involucrada en todos los proyectos, filtrando información inspiradora de nuestro enorme equipo de 80 personas en cada artículo, foto, video e historia que publicamos.
Nuestra familia Amigos tiene un impacto cada día, y la pasión de Ivette es encontrar y compartir las historias que resaltarán ese impacto. Pero su mayor don en Amigos, y al mundo, es su corazón. A través de cada clic de su cámara y cada historia que escribe, cada persona que Ivette conoce sabe que son valorados y amados. Su foto de una familia sonriente en frente de su nuevo baño moderno es verdaderamente hermoso.
Aún más hermoso es el hecho de que la familia sabe que su foto será utilizada para animar a aquellos que ayudaron a construir su baño porque Ivette se lo explica. Ella se toma el tiempo para conectar nuestras diferentes culturas, para permitirnos a todos ver cómo estamos juntos en esto.
Ivette ha visto sus oraciones contestadas. Ella está cambiando el mundo todos los días con cada historia que escribe y cada foto que toma, haciendo que Cristo sea más visible a medida que lo hace.
“Mi mayor esperanza es que, a través de mí, a través de nosotros, nuestra gran familia Amigos sepa que son amados. Les dará esperanza para seguir adelante. He aprendido que si tenemos fé podemos hacer mucho. Dios tiene un plan específico para todos. Eso lo he aprendido de mi propia experiencia”.
