Un poco de plástico, un poco de aire y, si tuvo suerte, uno brillante de helio que permaneció en la casa durante 2 semanas… flotando lentamente hacia el suelo como una hoja caída. (¡Y en mi casa coleccionaba diferentes restos de las chimbombas y volvía LOCA a mi mamá!) Los globos se sentían mágicos y provocaban asombro. ¿Cuántos podríamos atarnos a la cintura para volar? ¿Cuántos juguetes podría hacer flotar el globo de helio? Podríamos tararear a través de ellos y dejar salir el aire mientras los inflamos con chillidos ensordecedores.
Mateo 18:3-5
El mensaje
Como respuesta, Jesús llamó a un niño, lo puso de pie en medio de la habitación y le dijo: “Te digo, de una vez por todas, que a menos que regreses al punto de partida y comiences de nuevo como niños, ni siquiera va a echar un vistazo al reino, y mucho menos entrar. Quien se vuelva simple y elemental de nuevo, como este niño, ocupará un lugar destacado en el reino de Dios. Es más, cuando recibes el child like en mi cuenta, es lo mismo que recibirme a mí.